La sonrisa gingival o sonrisa alta se da cuando al sonreír se ve una zona excesiva de la encía. Se dice que la sonrisa ideal debe mostrar un máximo de dos milímetros de encía, y todo lo que supere esa medida se considera sonrisa gingival.
Por lo general, se trata de un problema más bien estético que patológico. Sin embargo, es conveniente consultar un especialista por si la sonrisa gingival nos está produciendo problemas en la mordida, y como consecuencia problemas en nuestra salud bucodental.
Una sonrisa gingival puede producirse por diversas causas. Algunas pueden estar relacionadas con la genética, pero en otros casos, puede ser consecuencia de no cuidar los dientes como es debido. Existe solución para evitar la sonrisa gingival, estas son algunas causas de su aparición:
- Mala mordida. La mala mordida es un rasgo principalmente hereditario que provoca la sonrisa gingival. Si la mandíbula superior no se alinea bien con la inferior, se da lo que conocemos como mala mordida, la cual puede causar gran cantidad de problemas y dolores de mandíbula. Cuando la mandíbula superior sobresale más de lo que debería, se produce la sonrisa gingival.
- Exceso de tejido gingival. Es decir, tener exceso de encías. Esta es la causa más común de la sonrisa gingival. En muchos casos, se produce un crecimiento excesivo de tejido de las encías que cubre demasiado los dientes.
- Músculo elevador del labio superior muy desarrollado. Si el labio superior se mueve excesivamente para arriba, se enseña más encía. Esta causa también es genética. Esto también se denomina “labio superior hiperactivo”. El uso excesivo de estos músculos puede hacer que el labio superior se exponga al tejido de las encías.
En estos casos, es necesario llevar un buen cuidado dental y un tratamiento dental adecuado para reducir la sonrisa gingival.
Existen muchas formas de corregirla, pero el tratamiento dependerá de la causa que haya producido la sonrisa gingival. Estas son algunas de las opciones:
- Ortodoncia. Los tratamientos de ortodoncia pueden ayudar a corregir los problemas de mandíbula y de mordida, por lo que al sonreír, las encías se verán más pequeñas.
- Carillas o coronas. Cuando la dentadura superior parece demasiado corta, el tejido de las encías se hace más visible al sonreír. Las carillas o coronas dentales harán que los dientes parezcan más largos, así, los dientes y las encías estarán equilibrados y la sonrisa se verá más bonita.
- Gingivectomía. La mayoría de los pacientes que padecen sonrisa gingival experimentan un exceso de tejido de las encías. En estos casos, se puede realizar una gingivectomía, a través de la cual se extrae el exceso de tejido de las encías y se reforma el tejido existente para que los dientes se vean más.
- Gingivoplastia. En este caso lo que el facultativo pretende es devolver el contorno de la encía cuando se ha perdido la bolsa periodontal. En muchas ocasiones esta intervención se hace de manera complementaria y de forma simultánea con la anterior (gingivectomía).
- Botox. Se utiliza cuando tenemos un labio hiperactivo o hipermóvil para bloquear el movimiento de determinados músculos.
- Cirugía de alargamiento de la corona. Cuando los dientes se ven más cortos, es porque probablemente no han salido por completo. A través de esta cirugía se extrae tejido o hueso de las encías para exponer más la parte del diente, lo que hace que las encías se retiren a su posición correcta.
En Clínica dental Giariber somos profesionales con una amplia experiencia en el cuidado de cualquier patología bucodental. Si crees que padeces de sonrisa gingival, no dudes en ponerte en contacto con nosotros sin compromiso.
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